¡Buen día queridos lectores!
Dicen que a veces lo mejor se deja para el final y este viaje no fue la excepción. Ya pasó más de un año desde nuestro recorrido costa a costa por Estados Unidos y es hora que les cuente de nuestro último destino antes de volver a casa: Chicago.
Por su intensa brisa es llamada la ciudad del viento, tanto que el frío se mete hasta en los huesos. Es un destino súper recomendado, lleno de sorpresas y cosas por hacer. Desde que la conocí está en la lista de mis 10 ciudades favoritas en todo el mundo. Y es que, aunque me encanta Nueva York como destino turístico, Chicago es la ciudad donde escogería vivir. Al igual que NY está lleno de cosas para hacer, con gente por todas partes pero es muy tranquila y todos están dispuestos a ayudar. Tiene una amplia oferta gastronómica, los mejores hostales de todo el viaje y un transporte publico, que a mi parecer, facilita la vida del turista a un precio accesible.
Antes de viajar, en varias ocasiones nos comentaron que podía ser una ciudad insegura por problema de pandillas que tiene, lo que nos hizo estar un poco prevenidos al llegar pero la verdad es que no hay nada de que preocuparse. Es una ciudad amable, en la que se puede caminar, tomar el transporte y pedir ayuda a extraños.
Duramos en la ciudad cerca de 5 días y la recorrimos sin parar. Compramos el pase de tres días de transporte público que, a mi parecer, es el más recomendado pues integra el bus y el metro elevado, que permiten llegar a casi cualquier parte de la ciudad. La opción más rápida es el metro pero por lo general es necesario caminar un poco más para llegar a las estaciones, así que si no hay afán y tienen la paciencia para esperar, ya que es común que el bus se demore en llegar, el bus es una excelente opción.
El corazón de Chicago se llama The Loop. Es la zona turística, comercial y más bonita de la ciudad. Es tan grande que casi todos los lugares que les recomiendo visitar están allí: el «Grant Park» o Lake Park por su cercanía al lago Michigan, el Millenium Park con su sublime Cloud representativo de la ciudad, el Instituto de Arte de Chicago con el Puente Nichols, la Magnificient Mile para los amantes de las compras y la Torre Willis que es el segundo rascacielos más alto de Estados Unidos.
Pero mi lugar favorito está a unos metros del Loop, fue fundado en 1916 como parte del proyecto de la ciudad y se convirtió en un lugar de esparcimiento para todos sus habitantes. Navy Pier es el imperdible de Chicago y hogar de la rueda gigante que lleva su nombre. Tiene un cinema, un museo, muchos juegos mecánicos y maquinitas pero lo mejor, es quetambién es el destino más romántico de la ciudad, con la vista más increíble que no dudo ha sido testigo de muchas declaraciones de amor. No dejen de visitarlo.
¡Les escribo pronto! 🙂
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